Fotografías realizadas por el hermano Lucas Alvarez.
Lo acontecido esta mañana en la Parroquia de Santiago ha sido algo histórico y con sabor agridulce, ya que el fin de dicho acto era más que razonable, pero la nostalgia era evidente tanto en los que allí nos encontrábamos para ejecutar los trabajos de desarme como los vecinos que se acercaban para preguntarnos él que porque se quitaba y donde nos lo llevábamos, pero eso sí, todos censurando los actos de vandalismos de estas últimas fechas. Y sí, ya el Azulejo de nuestro Prendi, el que muchos jerezanos le lanzaban algún rezo,alguna ofrenda y alguna petición, lo hemos tenido que retirar de la Fachada del templo para conservarlo como Dios manda. Las miradas a esa esquina de nuestro barrio se han quedado huérfanas, pero esperemos que un futuro no lejano, Santiago pueda ver su azulejo donde debe, en su Templo del Real y Refugio de nuestro BARRIO DE SANTIAGO.
Tristísima noticia. No tenemos bastante con nuestra iglesia cerrada y cayéndose a pedazos y ahora tener que retirar el azulejo de nuestro Padre. Que de miradas, rezos, besos, etc. han ido a posarse en ese azulejo. Que de penas, alegrías, fatiguitas y gozos a vivido. Han desarmado a nuestro barrio hermanos, no sé donde vamos a llegar. Solo esperar, que esa obra termine lo antes posible y que se coloque al Señor en su lugar, presidiendo a su barrio. Yo, mientras, seguiré buscando esas manos en esa esquina, cada vez que pase.
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