Un año más en el que algunos volvemos a vernos tras casi un año de espera.
Un año que se nos pasa volando entre sueños de volver bajo sus trabajaderas.
Un año en el que tenemos la fortuna de volver a sentirla en los hombros.
Un año en el que hemos revivido durante todas las noches aquellos momentos de un Miercolés Santo que siempre será único e irrepetible: quien no se emociona recordando sonidos de una tarde-noche para guardarla en un rinconcito de nuestra alma.
Un año, en la que Ella, espera paciente, en su Refugio del antiguo Hospital de la Sangre, y reza por y para cada uno de sus "niños", los niños del Desamparo.
Ahora de nuevo cominenza el Trabajo, el día 15 en el Asilo San José; puntuales a las nueve; como siempre alardeamos de serlos.
Que VIVA nuestra mare del Desamparo.
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Un año... Tan solo un año y que larga se hizo la espera. Un zanco, pesado zanco que tan sólo un año hizo que un costalero soñara con otro Miercoles Santo.
ResponderEliminarSi señor, ahí estaré como un hermano más. Como un hijo más del Desamparo. Porque me hicisteis sentirme de nuevo costalero. Con brotes nuevos como las vides nuevas. Como el mosto que nace cada año. Y este costalero pasó de sentirse "SOLERAS" de vino añejo a mosto nuevo y rejuvenecido.
Gracias hermanos por haber regado mi sentir constalero con agua limpia, clara y nueva de las lluvias tempranas. Gracias por haberme hecho sentir tantas y tantas cosas....
Y como dije el pasado Miercoles Santo, que la Reina de Santiago siga derrochando gitanería por las calles de ese barrio antiguo, añejo y flamenco de Jerez.
Uno más de vosotros...
Bien por ti Ramón Curro, eres persona de categoría y como amigo más vale aún. Es un orgullo que formes parte de esta humilde familia
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